Querido Jack...

Me contaron que el mar era azul

y aquí he venido a encontrar tu mirada,

tentado de arrojarme en él,

buscando tu abrazo.

Porque te extraño

y mi consuelo es buscarte

en cada detalle de mi alrededor,

sonriendo a veces,

ahogando el llanto siempre...

Pero necesito hacerlo,

tanto como soñarte,

tenerte conmigo día y noche...

como antes...

pero ¿qué digo? ¿antes? ¿antes de tu muerte?

Si sólo hay un antes

y son los días anteriores a conocerte...

En ese tiempo fue cuando no te tuve

luego... todo fue "después":

del apretón de manos al presentarnos

de la primer cerveza,

de las charlas,

de aquella noche y de la otra

y de todos los los momentos que siguieron...

Desde entonces yo fui diferente,

tú te quedaste en mi...

Antes de Brokeback

yo no era yo:

ni siquiera tenía voz,

sólo palabras encerradas,

que tú me supiste arrancar.

No importaban los recuerdos,

y hoy vivo por ellos, son todo lo que tengo.

Ahora eres el mar...

vas y vienes en mi vida

un fantasma y una realidad;

las chispas que brillan con el sol,

tu sonrisa;

la espuma que envuelve mis pies en la orilla,

tus caricias...

Y yo... tan sólo soy ese cielo encima del mar,

mirándote sin poder abrazarte

esperando ser lluvia

para diluirme en ti

sentir otra vez que vivo,

ser uno,

por siempre, contigo.